No digo demasiado
Un pequeño programa de radio, hecho de poesía, música y algunas charlas...
Invocación para “No digo
demasiado”
Yo quiero que este programa esté hecho del canto de los
grillos,
de la música que las ranas cantan cuando nace la noche en
mi barrio.
Que su materia sea el quejido remolón de una amante,
el llanto de un viejo,
la risa de un chico jugando en el patio,
que se mueva como el
vaivén del remar lento de un pescador en su canoa,
que su esencia traiga la sombra más oscura de mi alma,
y la luz más radiante del Universo;
…poca cosa quiero.
Igual, me conformo con que llegue a ser un susurro de la
noche,
como el Paraná que corre entre los juncos.
Locamente sueño que para alguien sirva como sirvió el
“mañana”,
escrito en la
esquela de “Los árboles mueren de pie”.
Quiero que éste programa junte, como juntan 3 huevos en
la masa de la torta,
Quiero que leude como leuda la masa del pan,
Quiero que calme como el aloe en la cara quemada del
verano
Quiero que fluya suave como un brazo del río en bajante.
Quiero que sea un tónico, que se aplique como un bálsamo,
Que cure heridas o que las alivie si no puede curarlas,
Que suavice lo duro,
Que agrande lo pequeño, y
al revés,
que desinflame las hinchazones.
Que le dé su justa dimensión a las palabras.
Que sea una chispa
Y si puede,
Que sea una llama.
Osvaldo C. Trossero
Qué buen nacimiento! Felicidades!
ResponderEliminarBesos y abrazos
Silvina